DESCRIPCION
El estilo mediterráneo tradicional es claramente evidente en esta casa, ubicada en una zona residencial tranquila y conocida, a pocos kilómetros al norte de Alvor y Portimão. La propiedad se asienta sobre un terreno de 5.150 m², con una ligera pendiente, donde su posición, en lo alto de la colina, permite una amplia vista, ya sea sobre el océano o sobre el campo (hacia Lagos), pero sin comprometer su privacidad. Esta encantadora casa de una sola planta de 442 m² se ha dividido en 3 viviendas independientes. Cada piso tiene un hermoso salón con cocina, 2 dormitorios (uno con baño y vestidor), 2 baños, una despensa y acceso a una terraza privada orientada al sur. La casa se puede convertir fácilmente en una villa independiente, con mucho espacio para acomodar a una familia numerosa, o alternativamente en una casa de 3-4 dormitorios con un apartamento independiente de 2 dormitorios. En el exterior se encuentra la piscina de agua salada de 12x6, que se beneficia de un edificio de apoyo a esta zona, compuesto por una cocina exterior, baño y sauna, y un hermoso jardín maduro, en perfecta armonía con la naturaleza circundante. La propiedad también dispone de una plaza de aparcamiento cubierta para 3 coches y un trastero para maquinaria y herramientas. La propiedad está equipada con paneles solares, calefacción central de gas y solar, bomba de calor, portón eléctrico, riego automático en el jardín... ¡Una hermosa propiedad en una ubicación ideal con mucho potencial! A poca distancia se encuentran los encantadores pueblos pesqueros de Alvor con sus hermosas playas de arena y sus famosos campos de golf como Penina Golf. Portimão, la ciudad más grande del Algarve occidental con todas las infraestructuras, también está a poca distancia. Alguna vez fue un lugar donde la construcción de barcos, la pesca de sardinas y el procesamiento de pescado representaban la mayor parte de la actividad de la ciudad. Sin embargo, la mayor parte de esta industria ha sido sustituida por el turismo, el entretenimiento y los servicios, convirtiéndola en una gran ciudad residencial, en perfecta armonía con su centro histórico peatonal y sus zonas ribereñas. Esta evolución ha convertido a la ciudad en un lugar atractivo para ir de compras y admirar su historia y la proximidad al río y al mar. Los antiguos y concurridos muelles pesqueros se han transformado también en un largo paseo integrado con las plazas arboladas del casco antiguo donde no faltan cafeterías, bares y restaurantes para disfrutar de la excelente gastronomía y repostería tradicional con una vista despejada. A pocos minutos del centro de la ciudad se encuentra la icónica Praia da Rocha con su extensa playa de arena, aguas cristalinas y majestuosos acantilados que se extienden hasta las playas de Amado y Vau. Ferragudo y Carvoeiro, los baños termales de Monchique, Lagos (la ciudad de los descubrimientos) e incluso Sagres se encuentran a entre 20 y 30 minutos. Lisboa y Sevilla están a unas 2,5 horas y el aeropuerto de Faro está a sólo 45 minutos.
