DESCRIPCION
En Alba Iulia, ciudadela histórica espectacularmente renacida como centro cultural-turístico, se ha levantado recientemente sobre una suave colina una villa moderna, con un exterior orgulloso, ángulos rectos y volúmenes claramente definidos. La construcción aprovecha el desnivel y mira hacia el valle a través de grandes superficies acristaladas y generosas terrazas. La vista es espectacular y se adentra en el cielo: el valle cuesta abajo no está poblado agresivamente, los pocos edificios son altos y las tierras están parceladas de manera organizada y armoniosa. La austera elegancia de la fachada encaja con el perfecto césped de la terraza y el pavimento de piedra metalizada de calidad. Los materiales elegantes, duraderos y de alta calidad utilizados todavía son raros en el paisaje local: fibrocemento Equitone en la fachada en perspectiva, madera de pino nórdico natural, ladrillo a la vista y Sto decorativo. En el interior, los espacios son amplios, luminosos y minimalistas para dejar circular el aire, la luz y los buenos pensamientos; la chimenea promete calidez y la magia del alegre crepitar de la madera. El espacio está bien compartimentado, con habitaciones funcionales; la cocina está amueblada y equipada, y los baños están impecables, elegantes, con luz natural y colores discretos. La escalera interior atrae la atención, siendo a la vez un elemento práctico y decorativo en la economía de la sala. Hay espacio para una biblioteca en el ático y un cine en el sótano. Lo que realmente marca la diferencia aquí es la tecnología. La villa es un ejemplo perfecto de una casa inteligente: el agua de lluvia se recolecta para el riego, hay cámaras de video, sensores de presencia y sistemas antirrobo. Se controlan el acceso, la temperatura, la humedad y la iluminación; las cortinas están motorizadas y muchas zonas de la casa están insonorizadas de forma independiente. Además, en la cubierta se habilita un “área observadora” que registra los indicadores climáticos y los transmite para decidir automáticamente el riego o el movimiento de las persianas. Los baños cuentan con sensores de inundación que deciden, cuando es necesario, cortar el suministro de agua a todo el sistema y el sistema envía notificaciones al propietario sobre los eventos ocurridos en la ausencia. Foto Florín Pepene
