DESCRIPCION
Prestigiosa villa histórica en Montecavolo, a las afueras de Reggio Emilia
En el corazón de Montecavolo, a solo 12 kilómetros del centro de Reggio Emilia, se alza una elegante villa histórica de prestigio inigualable, enclavada en un parque privado de más de tres hectáreas. Este enclave atemporal rezuma la elegancia de épocas pasadas y conserva la singularidad de un contexto arquitectónico excepcional y de excepcional valor.
El complejo se divide en tres secciones diferenciadas: la majestuosa villa principal con reloj de sol y dos apartamentos más sencillos; un edificio de estilo neogótico; y una antigua granja. Cada unidad conserva intactas sus características arquitectónicas originales, realzadas por las expertas y respetuosas intervenciones estructurales realizadas a lo largo de los años.
La villa principal, el verdadero corazón de la propiedad, se extiende sobre aproximadamente 970 metros cuadrados en cuatro niveles, además de la torre. La planta baja, de aproximadamente 280 metros cuadrados, alberga las salas de recepción: amplios salones, un elegante estudio, una amplia cocina y un baño de invitados. Los dormitorios privados se encuentran en la primera planta, a los que se accede por una escalera secundaria al ático. Una escalera de caracol conduce a los dos niveles superiores de la torre, que ofrecen vistas inigualables de la finca y el paisaje circundante.
El ala neogótica alberga dos unidades independientes, cada una de aproximadamente 280 metros cuadrados, distribuidas en tres niveles. Esta estructura arquitectónica se distingue por el uso de cautivadores elementos paisajísticos, como ventanas con parteluces, torretas y muros almenados, que evocan magistralmente el estilo neomedieval, dotando al conjunto de un aire de cuento de hadas.
El antiguo edificio rural, de aproximadamente 580 metros cuadrados distribuidos en dos plantas, conserva intacta su histórica "porta morta" (puerta muerta), que conectaba los antiguos establos con los cuartos de servicio. Un pórtico en la fachada este se abre elegantemente al patio interior, creando una conexión visual y funcional con la villa principal. Este edificio fue objeto de importantes reformas en la década de 1980: se renovó por completo el tejado con vigas de madera, se reemplazaron los suelos por completo y se reforzó todo el perímetro con un bordillo de hormigón pigmentado color amaranto. Algunos muros se consolidaron, otros se construyeron desde cero, convirtiendo el edificio en una base sólida y versátil para su futura transformación en una residencia de lujo o un hotel.
El parque, que se extiende sobre 32.000 metros cuadrados, antaño cultivado como huerto, aún conserva árboles centenarios y claros rastros del jardín original del siglo XIX, con senderos históricos, esculturas decorativas y referencias mitológicas que representan las Cuatro Estaciones y el mito griego de Leda y el cisne.
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