DESCRIPCION
Bienvenidos al número 86 de Hollybrook Road, una preciosa casa de época de ladrillo rojo, bellamente renovada, que ofrece la combinación perfecta de encanto atemporal y lujo contemporáneo. Con una ubicación ideal en el corazón de Clontarf, uno de los barrios más cotizados de Dublín, esta excepcional propiedad se encuentra a un corto paseo de los vibrantes servicios que hacen de esta zona un lugar tan deseable, y a menos de 5 km del bullicioso centro de Dublín. Desde el momento en que se cruza la puerta principal, cuidadosamente restaurada, se accede a un recibidor cálido y acogedor que pone de manifiesto la artesanía y la atención al detalle de la vivienda. Como en toda renovación de época exitosa, los actuales propietarios han logrado rendir homenaje al carácter original de la propiedad, creando a la vez un hogar con todas las comodidades modernas imaginables y un toque de distinción gracias a sus elegantes elecciones de diseño. Los dos salones originales están conectados por puertas dobles que se deslizan hacia un hueco para crear un espacio diáfano ideal para recibir invitados, aunque también pueden utilizarse por separado, tal y como se concibió originalmente. En un extremo de la habitación, una encantadora ventana mirador con marcos de madera y doble acristalamiento, junto con una puerta corredera que da al patio, cuenta con una ventana Crittall y un panel de vidrio que permiten la entrada de luz natural durante todo el día. El suelo de roble semimacizo se extiende por toda la estancia, con dos chimeneas de hierro fundido y azulejos, y vitrinas retroiluminadas a medida de Woodale Design en ambas habitaciones. La moldura decorativa del techo y el rosetón central se conservan intactos. La transición entre lo antiguo y lo nuevo es fluida gracias al desnivel. Bajo la escalera se encuentra un aseo de invitados con ducha, un despacho/estudio con vistas al patio y acceso a la cocina abierta integrada en el solárium. La ampliación de la cocina, diseñada por un arquitecto, es la pieza central de esta magnífica vivienda familiar. Un espacio concebido para satisfacer diversas necesidades, pensado principalmente para que toda la familia se reúna a lo largo del día. Las puertas y ventanas acristaladas se extienden desde el suelo de espiga hasta los techos de 4,2 metros de altura, con acceso directo al jardín. Los paneles de vidrio y el tragaluz de pared a pared cumplen a la perfección con el objetivo de conectar la casa con el jardín, aprovechando al máximo la luz solar. En el centro de la cocina se encuentra una isla, hecha y pintada a mano por 'Hannaways of Hilltown'. Hay una pared con armarios de almacenaje y vitrinas de 'Woodale Design' y un lavadero ingeniosamente oculto tras puertas plegables, con todas las conexiones de fontanería. La cocina de la pared opuesta cuenta con armarios a la altura de la vista y del suelo, una despensa oculta de exquisita factura y un frigorífico doble. También hay una estufa de leña suspendida que se convierte en el punto focal de la estancia, entre el salón-comedor y el jardín y patio ajardinados. En la planta superior hay tres dormitorios y el baño principal, con espacio adicional para un estudio/despacho en el rellano. El baño, que originalmente se encontraba en el lateral de la casa, se ha trasladado a la primera planta y es sencillamente espectacular. Se ha conservado el diseño original de la chimenea y la ventana, pero ahora la habitación cuenta con lujosos azulejos, una bañera exenta y una ducha doble independiente con rociador efecto lluvia. El dormitorio principal cuenta con un mirador con un banco a medida, desde donde se puede contemplar el mar a lo largo de Hollybrook Road. Dispone de amplio espacio de almacenamiento y los paneles de madera en las paredes circundantes realzan la elegancia de la suite principal. Dos dormitorios en la planta superior completan la distribución, junto a un luminoso rellano donde los propietarios utilizan un despacho con una claraboya recién instalada y una lámpara diseñada por Zaha Hadid, que amplía visualmente el espacio. El jardín trasero, maduro y privado, cuenta con una zona de barbacoa justo al lado de las puertas del patio y un jardín paisajístico que disfruta del sol durante toda la tarde y la noche. La ubicación es inmejorable. A tan solo 5 km del centro de Dublín, Hollybrook Road está arbolada, con abundante aparcamiento y a poca distancia a pie de todos los servicios que hacen de Clontarf un lugar tan popular. La vivienda número 86 es una joya en el corazón de Clontarf y ofrece a sus nuevos propietarios una comodidad excepcional, tanto por su excelente ubicación como por ser una propiedad lista para entrar a vivir, algo poco común en el mercado actual.
