DESCRIPCION
El Entorno
En medio del encantador paisaje del centro de Ibiza se encuentra esta finca excepcional, escondida entre la extensa naturaleza, las colinas boscosas y las tierras fértiles. La parcela de casi dos hectáreas ofrece una privacidad inigualable y una sensación de libertad absoluta, con vistas que se extienden sobre el ondulante interior y la vegetación mediterránea. Su ubicación entre Santa Gertrudis y Sant Rafel la convierte en el lugar ideal para quienes buscan la auténtica tranquilidad de la isla, pero desean estar a pocos minutos de pueblos animados, escuelas internacionales y las playas más hermosas. Una armoniosa combinación entre comodidad y serenidad absoluta.
La Villa
Esta finca, recientemente renovada con exquisito gusto, es un ejemplo de elegancia y sofisticación. Su carácter histórico se ha conservado cuidadosamente, mientras que los elementos modernos y los materiales de alta calidad elevan el confort a un nivel contemporáneo. Con una superficie habitable total de 267 m², la casa ofrece espacios amplios que transmiten calidez y, al mismo tiempo, un aire de lujo.
Al entrar, te reciben espacios llenos de luz, con texturas naturales, muros de piedra a la vista y tonos suaves que se adaptan perfectamente al estilo colonial de la finca. La cocina y las zonas de estar fluyen armoniosamente entre sí, ideales para largas cenas o noches relajadas con amigos y familia. Los dormitorios, amplios, elegantes y tranquilos, ofrecen cada uno su propio nivel de privacidad. El dormitorio principal, situado en la planta superior, es un punto culminante, con vistas panorámicas que por la noche se adornan con las luces centelleantes de Dalt Vila, una escena que nunca deja de impresionar.
Los Espacios Exteriores
El espacio exterior está diseñado para disfrutar intensamente de la vida mediterránea durante todo el año. Una piscina privada y moderna forma el centro de las soleadas terrazas, rodeadas de un jardín bellamente cuidado que se integra perfectamente en el entorno natural. Zonas de sombra bajo árboles maduros, amplias áreas de descanso y vistas panorámicas convierten este lugar en un paraíso para los amantes del buen vivir. La amplia parcela de 19.187 m² garantiza una sensación de paz, espacio y completa privacidad.
Esta finca no es simplemente una vivienda; es una fusión única de historia, lujo y naturaleza. Una oportunidad excepcional para quienes buscan un lugar exclusivo que respire la esencia de Ibiza. Vívelo por ti mismo, una visita te convencerá sin duda.